RESOLUCIÓN SOBRE LOS RESULTADOS DE LAS ELECCIONES LEGISLATIVAS FRANCESAS Destacado
- Escrito por IU Aranda
- Publicado en Noticias y Actualidad
- Imprimir
Desde Izquierda Unida trasladamos nuestra más sincera enhorabuena a las compañeras y compañeros del Nuevo Frente Popular ante los resultados obtenidos en las elecciones legislativas de Francia. El Nuevo Frente Popular se sitúa como primera fuerza en la Asamblea Nacional después de una campaña construida desde la unidad y la articulación de un programa valiente. Queremos destacar la importancia que ha tenido para estos resultados la puesta en marcha de un proceso que consiguió, en un breve lapso de tiempo pero con urgencia, aunar a todas las fuerzas del campo progresista y construir así la alternativa a la extrema derecha y al neoliberalismo de Macron.
Desde Izquierda Unida trasladamos nuestra más sincera enhorabuena a las compañeras y compañeros del Nuevo Frente Popular ante los resultados obtenidos en las elecciones legislativas de Francia. El Nuevo Frente Popular se sitúa como primera fuerza en la Asamblea Nacional después de una campaña construida desde la unidad y la articulación de un programa valiente. Queremos destacar la importancia que ha tenido para estos resultados la puesta en marcha de un proceso que consiguió, en un breve lapso de tiempo pero con urgencia, aunar a todas las fuerzas del campo progresista y construir así la alternativa a la extrema derecha y al neoliberalismo de Macron.Francia ha vivido importantes movilizaciones populares en los últimos años que sin duda alguna han impulsado la creación del Nuevo Frente Popular y han posibilitado la capilaridad de una campaña en la que la militancia de todas las organizaciones políticas que conforman la coalición han tenido su voz y su espacio. El programa del Nuevo Frente Popular recoge luchas fundamentales que tienen su reflejo en nuestro país y que han sido capaces de movilizar a la ciudadanía progresista y demócrata, como son la subida del salario mínimo a los 1.600 euros, el bloqueo de los precios de productos básicos, la reforma del sistema fiscal para garantizar la progresividad, o la bajada gradual de la edad de jubilación hasta los 60 años.
La derrota de la extrema derecha es un hito importante que frena la tendencia europea en un país fundamental para la política del continente como es Francia. Pese a ello, es importante seguir articulando estrategias contra el auge ininterrumpido de votos del Reagrupamiento Nacional de Marine Le Pen, que pese a la derrota logra un nuevo máximo histórico con un 34% de los votos. Además, ha conseguido fagocitar a la derecha tradicional que representan Los Republicanos después de que estos articularan un discurso y una propuesta prácticamente indistinguible de la extrema derecha. La aproximación de la derecha tradicional a la extrema derecha es una dinámica que se está dando en todo el continente y cuya primera consecuencia es la entrega a las fuerzas reaccionarias de la capacidad de imponer su agenda.
La propuesta neoliberal que representa la coalición de apoyo al presidente Macron también ha salido derrotada de estas elecciones, dejándose 86 escaños. Es por ello que Francia debe tener un gobierno liderado por una primera ministra o primer ministro del Nuevo Frente Popular. La voluntad del pueblo francés se ha expresado claramente rechazando la llegada al poder de la extrema derecha, pero también la continuidad de un proyecto que ha posibilitado sus resultados históricos asumiendo una parte importante de su discurso en temas tan fundamentales como la inmigración. En cambio, un gobierno liderado por el Nuevo Frente Popular y con el conjunto de sus actores es hoy una oportunidad única para parar a la extrema derecha y demostrar que es posible poner en marcha una política en favor de las clases populares francesas. No se trata solo de contener a la reacción sino de cortar de raíz las causas que la empujan.
Estos resultados de la izquierda francesa amplían la posibilidad de que la excepción española de un gobierno progresista se extienda. Debemos trabajar de manera conjunta para propiciar un cambio en la correlación de fuerzas existente a nivel europeo. El ejemplo del Nuevo Frente Popular apunta a la necesaria articulación de un proyecto progresista, con las características de cada país, desde el que las fuerzas transformadoras podemos plantear una agenda de ampliación de derechos que sea capaz de derrotar los marcos a través de los que se está imponiendo la extrema derecha.
COMISIÓN COLEGIADA FEDERAL DE IZQUIERDA
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.