CONSEJO ESTATAL DE MEDIOS
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Llevamos 9 años de lucha, y por fin vemos algunos avances. Hoy damos unos primeros pasos para desmontar la ley mordaza y la criminalización de la protesta y vamos a seguir trabajando por su reforma integral antes de final de año. Todo esto lo estamos logrando gracias a ti, a tu lucha y a tu trabajo, que nos ha dado la fuerza para impulsar este cambio.
Esta conquista no está siendo fácil, lo sabes, pero también sabemos que cada avance que logramos es crucial. Si algo nos caracteriza en Izquierda Unida es nuestra lucha como militantes, sindicalistas y activistas por todo tipo de causas justas. Conocemos de primera mano todo el dolor que ha provocado esta ley, aprobada por el Partido Popular para reprimir la protesta contra sus recortes y su corrupción y por eso no vamos a parar hasta lograr su derogación completa. Hoy es un día para alegrarse de lo conseguido: despenalizar la captación de imágenes de la policía y suprimir los delitos de ofensa contra los sentimientos religiosos, la corona y otras instituciones que tanto ha usado la extrema derecha para perseguirnos. Pero no cejaremos hasta conseguir todos los objetivos. Nos va la democracia.Te ánimo a difundir esta información en tus redes sociales y también nuestro objetivo de seguir luchando hasta lograr la derogación completa.
Una vez más, gracias por tu trabajo y por tu compromiso, porque sin ellos no lograríamos estos avances.Un saludo,
Izquierda Unida Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.Desde la Concejalía de Juventud promovemos actividades para toda la gente joven de Aranda, este año en colaboración con @Eurofestival : concurso de bandas, conciertos, actividades en la calle, paellada gratuita y skape room al aire libre.
¡Animáos a participar!El portavoz parlamentario de Izquierda Unida y portavoz en temas de Interior del Grupo Plurinacional Sumar, Enrique Santiago, ha registrado en el Congreso dos iniciativas que buscan arrojar luz a nivel parlamentario sobre el espionaje policial perpetrado por miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado bajo órdenes del Ministerio del Interior del Gobierno del Partido Popular, con Mariano Rajoy como presidente y con Jorge Fernández Díaz al frente de este departamento.
En primer lugar, Santiago reclama al Ministerio del Interior actual “todos los datos que obran en su poder sobre los diputados y diputadas espiados en las legislaturas XI y XII por parte de unidades policiales”, es decir, aquellos/as que fueron elegidos en las elecciones de diciembre de 2015, hasta la disolución de las cámaras en marzo de 2019, “con fechas del espionaje o seguimiento que se les realizaron”.
Lo hace por una triple vía. En primer lugar, la petición señalada va incluida en una pregunta parlamentaria escrita, que firma Santiago junto a Fèlix Alonso, también diputado de Izquierda Unida. El suyo es uno de los nombres que aparecen en las informaciones de los últimos días sobre este caso de espionaje político como miembro del grupo de parlamentarios catalanes encuadrados entonces en En Comú, dentro del primer grupo parlamentario de Unidos Podemos.
De igual manera, como portavoz adjunto del Grupo Plurinacional Sumar, Enrique Santiago utiliza el formato de solicitud de informes y documentos que permite el Reglamento del Congreso para reclamar la “documentación obrante en el Ministerio del Interior sobre la operación de espionaje sobre Podemos-En Comú-En Marea y luego Unidos Podemos en las legislaturas XI y XII”.
Esta iniciativa parlamentaria se completa exigiendo la “relación de todos los diputados de Podemos-En Comú-En Marea y luego Unidos Podemos que fueron espiados, investigados o realizados seguimientos sobre sus actividades por parte de por parte de unidades policiales”, con “indicación expresa” de las “fechas en que se realizaron a cada uno las acciones de espionaje, investigación o seguimiento, así como con indicación de en qué consistió”.
En la primera de las iniciativas registradas, Enrique Santiago y Fèlix Alonso reclaman al departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska que dé cuenta por escrito sobre dos cuestiones que consideran fundamentales: “qué medidas disciplinarias va a tomar el Gobierno contra los funcionarios policiales implicados” y cuáles otras “para asegurarse de que no exista este tipo de espionaje a figuras electas en el futuro”.
En clave más política, interrogan también sobre “cómo valora el Gobierno las actuaciones del Ministerio del Interior de Mariano Rajoy en lo relativo al espionaje de diputados del entonces grupo de Unidos Podemos” en las legislaturas mencionadas.
‘Policía pepera’ más que ‘policía patriótica’
Los dos diputados de Izquierda Unida ponen en contexto estos hechos tan graves y, al margen de otras denominaciones utilizadas en los medios, señalan que “esta operación de espionaje eminentemente delictiva no es más que otro ejemplo de otras llevadas a cabo por esa ‘policía pepera’, que hemos ido conociendo en los últimos años”. Mencionan la denominada ‘Operación Kitchen’, “operación que ha determinado la acusación por graves delitos contra la cúpula policial de entonces, incluido el ministro Fernández Díaz, causa judicial que se encuentra en espera de juicio por parte de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional”.
En cuanto al caso actual, indican que la misma Audiencia Nacional “tiene ya las pruebas del rastreo masivo que hicieron sin aval judicial los agentes de la también denominada ‘policía patriótica’ con cientos de consultas sobre líderes, diputados y diputadas como Pablo Iglesias, Yolanda Díaz, Félix Alonso, Íñigo Errejón, Pablo Bustinduy, Joan Mena”, entre muchos/as otros/as.
Indican que la operación “se enmarca dentro del interés de Francisco Martínez (por entonces número 2 de Interior) en buscar datos que dañaran la reputación de los diputados y diputadas electos de Podemos-En Comú-En Marea, y luego Unidos Podemos”.
Valoran que esa “operación policial, supuestamente ilegal, se desencadenó cuando el PP temía perder el Gobierno tras las elecciones de diciembre de 2015, por una posible alianza del PSOE y Unidos Podemos junto a otras fuerzas minoritarias con las que podrían sumar los 176 diputados necesarios. Para neutralizar esa posibilidad, desde el Ministerio del Interior se planificó una operación consistente en desacreditar a los diputados de Unidos Podemos mediante la búsqueda de algún elemento en sus vidas que pudiera ser motivo de reproche social”.
El programa Vacaciones en Paz revela lo mejor de nuestro país y el mundo: la solidaridad entre pueblos.
Hoy ha sido un orgullo dar la bienvenida por primera vez a estos niños y niñas saharauis en un edificio del Gobierno, un lugar que siempre tendrán abierto, el Ministerio de Juventud e Infancia.
Pero, ¿qué es VACACIONES EN PAZ?
Los niños y niñas saharauis viven desterrados en la frontera argelina. Lejos del mar. No pueden siquiera imaginar su brisa, sus peces, su azul, su majestuosidad… Viven en una tierra torturada, dolida, como sus frágiles cuerpecitos. En esos cuerpecitos donde abundan parásitos, por la contaminación del agua; porque no hay con qué sanearla.
Hay mucha falta de proteínas y vitaminas en su organismo porque dependen de la ayuda internacional, que llega a lento y cansino ritmo. A veces se deteriora por el clima y el transporte. Se consume en ocasiones caducada. Otras veces no llega. Y hasta se amenaza con cortarla.
Estudian con escaso material escolar. Aprenden árabe y español, porque el castellano representa un elemento más de identidad. En los campamentos de refugiados saharauis, los niños y niñas juegan mucho, aunque de juguetes sólo tienen residuos de latas made in ayuda humanitaria, para suplir su traviesa fantasía.
Ahí donde los niños y niñas saharauis sobreviven, no hay plantas, ni palomas. Pero hace años gracias a proyectos como «Vacaciones en Paz” han vuelto a ser palomas mensajeras entre distintas culturas.
El hermoso proyecto solidario VACACIONES EN PAZ surgió hace cuatro décadas. Los primeros niños que vinieron veían con los ojos enormes abiertos de admiración, cómo era posible que de un grifo en una pared saliera agua. Los había que querían llevárselos de regreso a casa convencidos de que el grifo era el que obraba el milagro. A los diez mil niños y niñas que vienen ahora cada verano a España, ya no les sorprenden cosas así, pero no han perdido la ilusión por descubrir otras nuevas. Las familias españolas de acogida temporal, dicen que cada verano es más lo que reciben de los niños saharauis que lo que ellas les dan.
Hoy se ha registrado la Proposición de Ley para la reforma del artículo 35 que garantice los derechos y la protección de la infancia. Un mecanismo de acogida para la infancia migrante de carácter vinculante y solidario para todos los territorios de nuestro país.
No podemos olvidarnos de situar en el centro de los derechos y la protección a la infancia, frente al relato deshumanizador que sufren los niños y las niñas migrantes. Los derechos de la infancia no pueden ser voluntarios.
La reforma del art. 35 es un primer paso. Necesitamos una estrategia de país para hacernos cargo de la infancia migrante.
No puede ser que el PP pida una estrategia de país y que cuando presentamos el punto para crear ese espacio de trabajo, voten en contra.
Por Carlos Medina, concejal de Izquierda Unida en Aranda de Duero
En Aranda de Duero, tras doce años de gobiernos municipales de una derecha variopinta, pero cada vez más desnortada y conservadora, los resultados de las pasadas elecciones municipales nos dieron la oportunidad a nuestra coalición electoral de posibilitar un cambio.
En el contexto actual sólo las coaliciones entre diferentes pueden posibilitar gobiernos alternativos a los acordados por la derecha y la extrema derecha. El grado de implicación que desde las fuerzas de izquierdas demostremos con estas coaliciones es una cuestión de oportunidad política, pero también de responsabilidad democrática.
Esto se tradujo en un acuerdo de gobierno, respaldado de forma mayoritaria por las personas afiliadas tanto de Podemos como de Izquierda Unida. Este acuerdo nos llevó a incorporarnos a un gobierno que definimos como de coalición en minoría, de unidad y con vocación de cambio.
De coalición, porque estamos presentes distintas organizaciones. De unidad, porque participamos individuos y organizaciones con enormes diferencias ideológicas, pero con diálogo y el objetivo común de mejorar la ciudad. De minoría, porque de manera excepcional en la historia de Aranda, ni el PP ni el PSOE han querido (o sabido o podido) formar parte del gobierno. No sólo eso, durante la mayor parte del último año hemos visto con claridad una pinza tácita que impedía lograr avances en el trabajo municipal.
Somos un gobierno con vocación de cambio, claramente recogida en el acuerdo de gobierno. Pero a día de hoy estamos muy lejos de alcanzar los objetivos propuestos. Si bien los presupuestos han supuesto un primer paso hacia una gestión propia que cumpla con lo pactado, afrontamos una situación de relativa parálisis por el bloqueo político, la abundancia de incidencias y los males internos de nuestra administración local. La situación del Ayuntamiento y de Aranda de Duero cuando llegamos era lo bastante mala como para que conseguir lo básico resulte revolucionario.
Pero eso no ha impedido el desarrollar una dinámica transversal y constructiva dentro del gobierno, tanto en términos de colaboración como de trabajo. En el día a día, la relación d trabajo es buena y fluida. Además consideramos que el mantener la crítica a la interna del equipo de gobierno, ser claros en los desacuerdos entre organizaciones y mantener una relación de lealtad hacia los socios y los acuerdos alcanzados son elementos claves para consolidar nuestro papel en la coalición e impulsar nuestro programa.
Somos muy conscientes de que gobernar implica asumir contradicciones. Es necesario valorar mucho cada avance que consigamos. Contamos con dos concejales de izquierdas en un pleno de veintiuno. Pero pese a ello la izquierda arandina somos izquierda de gobierno.
Trabajaremos con humildad pero con la cabeza bien alta y si complejos. Desmarcándonos con serenidad y criterio propio cuando lo estimemos conveniente pero sin generar ruido innecesario: la población quiere soluciones, no que llevemos razón cada minuto. Defenderemos nuestras posiciones políticas con lealtad y paciencia para acometer la tarea necesaria de cambiar Aranda de Duero a mejor.
Desde Izquierda Unida trasladamos nuestra más sincera enhorabuena a las compañeras y compañeros del Nuevo Frente Popular ante los resultados obtenidos en las elecciones legislativas de Francia. El Nuevo Frente Popular se sitúa como primera fuerza en la Asamblea Nacional después de una campaña construida desde la unidad y la articulación de un programa valiente. Queremos destacar la importancia que ha tenido para estos resultados la puesta en marcha de un proceso que consiguió, en un breve lapso de tiempo pero con urgencia, aunar a todas las fuerzas del campo progresista y construir así la alternativa a la extrema derecha y al neoliberalismo de Macron.
Desde Izquierda Unida trasladamos nuestra más sincera enhorabuena a las compañeras y compañeros del Nuevo Frente Popular ante los resultados obtenidos en las elecciones legislativas de Francia. El Nuevo Frente Popular se sitúa como primera fuerza en la Asamblea Nacional después de una campaña construida desde la unidad y la articulación de un programa valiente. Queremos destacar la importancia que ha tenido para estos resultados la puesta en marcha de un proceso que consiguió, en un breve lapso de tiempo pero con urgencia, aunar a todas las fuerzas del campo progresista y construir así la alternativa a la extrema derecha y al neoliberalismo de Macron.Francia ha vivido importantes movilizaciones populares en los últimos años que sin duda alguna han impulsado la creación del Nuevo Frente Popular y han posibilitado la capilaridad de una campaña en la que la militancia de todas las organizaciones políticas que conforman la coalición han tenido su voz y su espacio. El programa del Nuevo Frente Popular recoge luchas fundamentales que tienen su reflejo en nuestro país y que han sido capaces de movilizar a la ciudadanía progresista y demócrata, como son la subida del salario mínimo a los 1.600 euros, el bloqueo de los precios de productos básicos, la reforma del sistema fiscal para garantizar la progresividad, o la bajada gradual de la edad de jubilación hasta los 60 años.
La derrota de la extrema derecha es un hito importante que frena la tendencia europea en un país fundamental para la política del continente como es Francia. Pese a ello, es importante seguir articulando estrategias contra el auge ininterrumpido de votos del Reagrupamiento Nacional de Marine Le Pen, que pese a la derrota logra un nuevo máximo histórico con un 34% de los votos. Además, ha conseguido fagocitar a la derecha tradicional que representan Los Republicanos después de que estos articularan un discurso y una propuesta prácticamente indistinguible de la extrema derecha. La aproximación de la derecha tradicional a la extrema derecha es una dinámica que se está dando en todo el continente y cuya primera consecuencia es la entrega a las fuerzas reaccionarias de la capacidad de imponer su agenda.
La propuesta neoliberal que representa la coalición de apoyo al presidente Macron también ha salido derrotada de estas elecciones, dejándose 86 escaños. Es por ello que Francia debe tener un gobierno liderado por una primera ministra o primer ministro del Nuevo Frente Popular. La voluntad del pueblo francés se ha expresado claramente rechazando la llegada al poder de la extrema derecha, pero también la continuidad de un proyecto que ha posibilitado sus resultados históricos asumiendo una parte importante de su discurso en temas tan fundamentales como la inmigración. En cambio, un gobierno liderado por el Nuevo Frente Popular y con el conjunto de sus actores es hoy una oportunidad única para parar a la extrema derecha y demostrar que es posible poner en marcha una política en favor de las clases populares francesas. No se trata solo de contener a la reacción sino de cortar de raíz las causas que la empujan.
Estos resultados de la izquierda francesa amplían la posibilidad de que la excepción española de un gobierno progresista se extienda. Debemos trabajar de manera conjunta para propiciar un cambio en la correlación de fuerzas existente a nivel europeo. El ejemplo del Nuevo Frente Popular apunta a la necesaria articulación de un proyecto progresista, con las características de cada país, desde el que las fuerzas transformadoras podemos plantear una agenda de ampliación de derechos que sea capaz de derrotar los marcos a través de los que se está imponiendo la extrema derecha.
COMISIÓN COLEGIADA FEDERAL DE IZQUIERDA
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